La ciudad de Nueva York es uno de los lugares más visitados del mundo, la metrópolis que nunca duerme, en la que la inconfundible escena nocturna está decorada de vinilos de neón, espectáculos de teatro y musicales, y, los mejores bares fusión. La experiencia de conocer Nueva York es mágica, contando con un sinfín de atractivos turísticos como la estatua de la Libertad, el Empire State Building, Times Square, Central Park o el Museo Metropolitano de Arte de Nueva York. Un viaje a Nueva York requiere de preparación exhaustiva para no perderse ningún lugar.
No obstante, la ciudad no es únicamente un conjunto de lugares que visitar, siendo uno de los puntos más significativos de Nueva York su variada vida nocturna, con infinidad de locales de moda en los que probar cientos de cócteles. En cada rincón de esta ciudad, desde los modernos rooftops hasta los clásicos bares clandestinos, se esconde una historia. Esto se puede ver en la emblemática película «Cocktail» de 1988, protagonizada por Tom Cruise en el papel de Brian Flanagan. Brian es un joven ambicioso que, tras abandonar la carrera militar, se sumerge en el mundo de la coctelería en Nueva York. La trama se centra en su asociación con Doug Coughlin, un experimentado y carismático bartender, que le ayuda a conocer la vibrante vida nocturna de la ciudad. Juntos, crean un equipo dinámico detrás de la barra, sirviendo cócteles creativos y atrayendo la atención de los clientes con sus habilidades de entretenimiento.
En este artículo, hablaremos de varios de los combinados que mejor definen el arte de la coctelería en la Gran Manzana. La esencia de la escena de cócteles neoyorquina, donde el arte de mezclar bebidas se fusiona con la sofisticación urbana, permite deleitarse con algunos de los cócteles más icónicos del mundo en sus increíbles locales nocturnos
Manhattan
El cóctel Manhattan, nacido en el corazón de Nueva York, es una obra maestra que encapsula la elegancia y la sofisticación de la Gran Manzana en un vaso. Esta creación atemporal se remonta al siglo XIX, perdurando gracias al equilibrio perfecto de sabores que contiene, así como a su estatus como un ícono de la coctelería clásica. El Manhattan se compone principalmente de whisky (tradicionalmente bourbon), vermut rojo y un toque de angostura. Su preparación es una danza de proporciones precisas y técnica experta, que da como resultado es un cóctel que destila la esencia misma de la ciudad que lo inspira: audaz, complejo y lleno de carácter.
Este elixir amaderado y especiado se sirve idealmente en una copa de cóctel y, a menudo, se adorna con una cereza maraschino, añadiendo un toque de dulzura que equilibra la robustez del licor. Un sorbo es suficiente para transportar a cualquiera a las glamorosas noches de esta ciudad que nunca duerme, donde cada bar cuenta su propia historia.
Brooklyn
El cóctel Brooklyn es una joya de la mixología que rinde homenaje al dinámico y culturalmente diverso distrito de Brooklyn en Nueva York. Esta creación audaz combina whisky, vermut seco, licor de cereza y amargo de angostura para ofrecer una experiencia de sabor compleja y distintiva. La base de whisky, preferiblemente bourbon, establece una nota robusta que se equilibra con el vermut seco, aportando matices herbales y una elegancia clásica.
El cóctel Brooklyn no solo es apreciado por su perfil de sabor bien equilibrado, sino también por su conexión con la historia y la identidad del icónico vecindario. Cada sorbo es una invitación a explorar la diversidad y la vitalidad de Brooklyn, capturando la esencia de sus calles animadas y su rica herencia cultural en su particular color pardo. Servido en una copa de cóctel con elegancia, el cóctel Brooklyn es una elección distintiva para aquellos que buscan una experiencia de cóctel con carácter.
Cosmopolitan
El Cosmopolitan es un resplandor rosa en el mundo de la mixología, erigiéndose como un ícono moderno y chic, y, tomando su nombre por la elegancia de la vida urbana y la cultura cosmopolita. Este cóctel, nacido en la década de 1980, ha alcanzado estatus de culto, especialmente gracias a su asociación con la serie de televisión Sex and the City, conocida en España como Sexo en Nueva York, siendo uno de los cócteles de películas y series más reconocibles. Las protagonistas de la serie disfrutando de este mítico combinado en sus fiestas nocturnas, a la par que degustan otros cócteles como Mojitos, Daiquiris y Margaritas.
La receta clásica del Cosmopolitan incluye vodka, licor de naranja triple seco, zumo de arándanos y un toque de zumo de lima fresco. Este cóctel no solo es una explosión de sabores vivaces, sino también un símbolo de la actitud audaz y sofisticada que caracteriza a las grandes ciudades. Servido en una elegante copa martini y a menudo adornado con una fina cáscara de naranja, el Cosmopolitan es una elección popular en bares de alta gama y reuniones sociales.
New York Sour
El New York Sour es oro interesante cóctel clásico que combina la complejidad del whisky con la frescura del jarabe de azúcar, culminando en una obra maestra de sabores y presentación. Este elegante brebaje no solo es una delicia para el paladar, sino también una obra de arte líquida. La base del New York Sour es el bourbon o whisky, incorporando jarabe de azúcar, y, zumo de limón fresco. Sin embargo, lo que eleva este cóctel a otro nivel es su distintiva «capa» de vino tinto. Tras la preparación, se añade cuidadosamente una flotación de vino tinto, creando un atractivo contraste visual y una capa adicional de complejidad de sabores.
A pesar de su nombre, cabe mencionar que no fue creado en Nueva York, pero, si fue popularizado en la ciudad. El cóctel original fue creado en Chicago, no obstante, su llegada a la Gran Manzana lo elevó hasta la popularidad actual, tanto que, tomó el propio nombre de Nueva York. Cada sorbo es un viaje desde la dulzura inicial hasta la profundidad sofisticada final, dejando una impresión duradera en el paladar de aquellos que buscan una experiencia de cóctel memorable.
Harlem Nights
El cóctel Harlem Nights es una oda a la rica historia y la vibrante cultura del famoso barrio de Harlem en Nueva York. Esta cautivadora mezcla fusiona ingredientes con elegancia, capturando la esencia de la escena nocturna y el patrimonio cultural de este característico vecindario de la ciudad. Como no puede ser de otra manera, cuenta con una base de bourbon que aporta calidez y profundidad y se equilibra con licor de café para darle un toque de indulgencia y complejidad. El amargo de chocolate completa la sinfonía de sabores, añadiendo un toque de amargor y un matiz irresistible.
Cada sorbo es una experiencia que conecta con la rica herencia cultural del barrio, recordando la época del Renacimiento de Harlem y la vitalidad de sus famosos clubes de jazz y locales nocturnos. El Harlem Nights no solo es un cóctel, sino también un viaje sensorial que rinde homenaje a la contribución única de Harlem al panorama cultural de Nueva York.